Historia de Amor
¿Qué hay dentro de esa caja marcada con el nombre Elizabeth?, pregunté con curiosidad. Decenas de recuerdos en forma de recortes de periódicos y fotografías. ¿Quieres verla? Así comenzó mi charla con Sergio Toledano, hijo adoptivo de Elizabeth Taylor y Richard Burton, quien, con tan solo 12 años, conquisto el corazón de la estrella.
Queen Elizabeth
La marca de Vallarta, como destino, comenzó cuando al puerto se le relaciono con los apellidos Burton –Taylor, asegura Sergio. Elizabeth y Richard llegaron a México en septiembre de 1963. ¿el motivo de su insospechada visita? La filiación de la versión cinematográfica de La noche de la Iguana, que Richard Burton estelarizaría. De acuerdo con el libro The Most Beautyful Wooman in the World , de Ellis Amburn, Taylor arribo al puerto con un cargamento de 74 maletas repletas de los más exóticos y originales atuendos y con la clara intención de mantener a Ava Gardner, la otra estrella del filme, lejos de Burton una vez que John Huston (el director de la cinta) gritara ¡corte!
Elizabeth y Richard en Villa Leonarda 1971 (foto: Gianni Bozzacchi)
‘Yo siempre digo que Elizabeth y Richard se enamoraron en Puerto Vallarta, pero también se enamoraron de Puerto Vallarta’
Azar, buena fortuna o destino
Yo me pregunto con frecuencia en qué momento se escribió el destino de Vallarta, comente Sergio. ¿habrá sido cuando Tennessee Williams escribió La noche de la iguana imaginando un mágico lugar de México? ¿Cuándo John Huston decidió filmar la cinta en el puerto? ¿O cuando Elizabeth decidió acompañar a su marido durante la filmación? Cualquiera que halla sido el verdadero detonador, la historia del puerto cambio para siempre. Por supuesto, no hay que olvidar la geografía única de este lugar. Es una de las bahías mas bellas del mundo. El agua es templada, la sierra- que termina en el mar- es majestuosa y sus pobladores son extremadamente amigables, describe Sergio con gran orgullo. Al final pienso que todo contribuyó a crear el mito de Puerto Vallarta.
El tío Bon Vivant
Yo nací en la ciudad de México, relata nuestro anfitrión, pero desde muy pequeño me mudé para acá , justo después de que murió mi madre.
Fue mi tío, Xavier de la Torre, quien me trajo a Vallarta para vivir con él. Xavier era muy cercano a Rock Hudson, amigo entrañable de Elizabeth, por lo que no paso mucho tiempo antes de que ella también se integrara al grupo de su tío, hombre increíblemente creativo y toda una celebridad en Vallarta. De la moda pasaba al interiorismo y de ahí a la escultura o a la cocina. Todo el mundo lo conocía y el conocía a todo el mundo. Su hogar (Villa Leonarda) era una verdadera meca creativa.
La fama de Xavier de la Torre creció cuando aparecieron publicadas fotos de Elizabeth en Vallarta luciendo sus diseños.
‘Xavier era muy cercano a Rock Hudson, amigo entrañable de Elizabeth, por lo que no paso
mucho tiempo antes de que ella también se integrara al grupo’
Sergio y su tio, Xavier de la Torre
Pueblo chico, Romance grande
Elizabeth y Richard iniciaron su relación en 1962, durante la filiación de la película Cleopatra, pero fue en Vallarta donde vivieron los mejores años de su romance.
‘Yo siempre digo que Elizabeth y Richard se enamoraron en Puerto Vallarta, pero también se enamoraron de Puerto Vallarta’, afirma Sergio
Cuando Elizabeth y Richard llegaron a Vallarta (1963), la localidad apenas superaba los mil habitantes-principalmente pescadores-, por lo que parte del encanto que ellos encontraron era que podían andar por las calles con tranquilidad.
Las numerosas fotografías de ellos caminando de la mano por las calles empedradas, descansando en los típicos equípales hechos a mano o pescando en Mismaloya (a bordo del ahora legendario barco Taffy) son las mejores pruebas de que sus días en México fueron inolvidables
Los Burton’s y Sergio
El hada madrina
Mi relación con ella era muy especial y única, explica Sergio. ¿Cómo fue que se convirtió en mi madrina? De una manera muy natural e inocente. Un día, mi tío me enseño una foto de ella y comentó: Mira Sergio, tu madrina. Yo solo sonreí y contesté: Sí, yo quiero que Elizabeth me acompañe en mi Primera Comunión. Él respondió: Muy bien la próxima vez que la veas pregúntale si quiere que seas su ahijado. Y así fue. El deseo del pequeño se hizo realidad, en una misa oficiada en la Parroquia de Guadalupe, frente a unos cuantos asistentes. Ella me pedía que la llamara madrinita. Nadie mas le dijo así, sólo yo, recuerda.
Elizabeth Taylor, Richard Burton y Sergio en su Primera Comunión
Richard y Sergio besando a Flor… Charles Collingwood y Xavier de la Torre
Esta casa nunca será tuya
Mi tío Xavier era del signo zodiacal leo, así que todos sus amigos siempre le regalaban figuras de leones. Por eso es que bautizó su casa Villa Leonarda. Y aun que ha sufrido algunas transformaciones, ahora es la mas antigua que existe en Vallarta. La casa estuvo algún tiempo abandonada tras su muerte. Yo venia de vez en cuando, pero en una de esas ocasiones la casa ya no me dejó ir.(actualmente Villa Leonarda se renta por temporada). Elizabeth venía a esta casa con regularidad. Recuerdo cuando yo llegaba de la escuela y me encontraba a todos reunidos platicando. Podrían ser Richard, Elizabeth, Xavier y Burt Lancaster, por ejemplo.
Creo que era mi tío, con un talento fuera de serie para crear ambientes, cocinar y decorar, el motivo por el que las reuniones se hacían siempre en Villa Leonarda. Era un espléndido anfitrión. Incluso, hay una anécdota muy interesante sobre esta propiedad. Según mi tío, un día Richard le ofreció comprárselas porque, al parecer, siempre le gustó más que la que él habitaba, a lo que Xavier respondió de manera amistosa pero definitiva: Mira Richard, tu tienes fama, avión privado una carrera extraordinaria y, especialmente, a Elizabeth Taylor, pero esta casa nunca será tuya.
Un nuevo amor
Al principio, Elizabeth y Richard rentaban Casa Kimberly- llamada así en honor a un antiguo dueño-, pero se enamoraron de ella en muy poco tiempo. Era una enorme( 10 recamaras, 11 baños y tres cocinas) pero tradicional casona jalisciense de ladrillo y teja posteriormente la unieron a otra propiedad con un puente color de rosa (réplica de El puente de los suspiros, en Venecia), donde construyeron la alberca y las habitaciones para los invitados. Yo podría vivir aquí, dijo ella la primera vez que la vio. No paso mucho tiempo antes de que Richard ofreciera 40mil dólares por la casona, para regalársela a Elizabeth por su cumpleaños 32, solamente un mes antes de contraer nupcias. Fue su hogar por la década siguiente y donde Elizabeth pasaba las tardes armando rompecabezas, mientras Richard devoraba un libro tras otro, recostado sobre una hamaca. Él era un apasionado de la literatura, asegura Sergio. Para Graham Jenkins, hermano de Richard Burton: Casa Kimberly fue el lugar donde nació su verdadero amor. Antes de Vallarta lo suyo era sólo un tumultuoso romance. Ahí los dos se volvieron uno solo. La residencia fue su primera propiedad como pareja, su centro de operaciones y hogar por la siguiente década. Para muchos la historia terminó en febrero de 1974, justo 10 años después, cuando Elizabeth celebro su cumpleaños 42 en Casa Kimberly. Sólo unos meses después la famosa mujer de los ojos violetas anunciaba al mundo su separación de Richard. Tras el divorcio, la propiedad quedó en manos de Taylor, quien finalmente la acabó vendiendo en 1990.
Elizabeth Taylor y Sergio bailando
El niño ciego y la falta de visión
La fotografía de mi Primera Comunión le dio la vuelta al mundo, narra Sergio. La crónica del acontecimiento, celebrado el 13 de mayo de 1969, apareció en la revista LIFE con el encabezado El hijo mexicano de Elizabeth Taylor, lo que conmocionó al planeta entero. En esa época inventaron muchas cosas acerca de mi origen y supuesta adopción.
Incluso, llegaron a decir, a partir de la fotografía en la que aparezco con lentes obscuros, que yo era un niño ciego, hijo de unos pescadores que habían muerto en un accidente automovilístico. Se trataba de una de las parejas más importantes en la historia del cine, así que ahora no me sorprende que haya sido así.
Elizabeth Taylor, Richard Burton y Sergio Toledano